Malvenida!

Teoría del enjambre, una extensión más en busca de la individualidad


lunes, 18 de mayo de 2009

Te salvaste... Benedetti

Y él decía,

"No te quedes inmóvil al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca

No te salves
no reserves del mundo
sólo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados
pesados como juicios"
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo"


Pero si
pese a todo
no puedes evitarlo

y congelas el júbilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y reservas del mundo
sólo un rincón tranquilo ...

[ Yo ahora te digo...]
(con signos de puntuación)

Y dejaste caer los párpados
pesados como tus libros
y se secaron tus labios
y te dormiste ¿sin sueño?
y te pensamos (ahora) sin sangre
y te juzgaste... ¿con cuánto tiempo?

Te quedaste inmóvil
al borde del camino
a la orilla de un poema
en la construcción de un libro

¡Te salvaste!
y ahora...
no te quedaste conmigo...





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